Comunicado de Decano y ViceDecano Fac. Filosofia

A LA COMUNIDAD DE ACADÉMICOS, ESTUDIANTES Y FUNCIONARIOS DE LA FACULTAD DE FILOSOFÍA Y HUMANIDADES.


El día 28 de noviembre, se produjo una nueva manifestación violenta desde las 18 y hasta las 20.30 hrs., llevada a cabo por un grupo de encapuchados en circunstancias que la Facultad estaba casi desierta, los funcionarios ya se habían retirado y las clases de pregrado finalizadas el viernes pasado. Esta acción se suma a varias otras que se vienen realizando desde los últimos meses y que han afectado gravemente las actividades que llevamos a cabo como Facultad y, en especial, como Escuela de Postgrado.

La de ayer, sin embargo, no fue solo una manifestación violenta más con bombas molotov, en la cual un grupo de manifestantes se enfrenta a Carabineros lanzando volantes por la situación de los mapuches. Ayer unos encapuchados penetraron subrepticiamente en una de las bodegas de la Biblioteca de la Facultad, supuestamente violentando una puerta, para robar aproximadamente 1.200 libros que estaban en proceso de reordenamiento y a punto de ser catalogados e instalados en las nuevas dependencias de la Biblioteca (según informe escrito de la Directora de la Biblioteca). Los libros aparentemente fueron metidos en bolsas plásticas de basura y, como descubrieron posteriormente y con horror algunos de nuestros alumnos y profesores, fueron usadas para encender barricadas en Avenida Grecia. Fueron robados y quemados libros en una hoguera que recuerda los peores momentos del fascismo y de la dictadura. De los restos que pudieron ser rescatados, se advierte que algunos de esos libros formaban parte de colecciones patrimoniales, en concreto de la biblioteca donada por Mariano Latorre. Se trata por lo tanto de una pérdida no solo para la Universidad sino también para el país.

Se produjeron así tres actos que como autoridades, queremos denunciar y rechazar ante toda la comunidad universitaria:

a) una manifestación violenta, ajena a nuestra Facultad, que va en contra de todas las formas de convivencia universitaria, que es ajena a todo lo que hemos logrado construir como espacio de pensamiento, de crítica y discusión;
b) un robo, una acción delictual que además dañó de manera irreversible parte del patrimonio cultural del país, custodiado por la Universidad
c) una atrocidad, puesto que al quemar esos libros, los encapuchados cometieron un acto que no había ocurrido en nuestra historia universitaria y que solo tuvo lugar en Chile en los años más negros de la Dictadura.

Ante estos hechos deleznables hemos adoptado las siguientes medidas:

1. Petición al Rector para que se querelle judicialmente y por lo tanto solicitándole que se realice una investigación a fondo sobre lo ocurrido. Cuestión a la que el Rector ha accedido y se hará a primera hora del jueves 30 de noviembre.

2. Iniciación de un sumario interno para recabar toda la información posible acerca del acceso, robo y cuantificación de los libros faltantes en la bodega del subterráneo de la Facultad.

3. Denuncia pública a los medios de comunicación, entre otros Radios Bio-Bio, Universidad de Chile y Cooperativa, diarios La Nación, El Mercurio y La Tercera. Todos vinieron y conseguimos la presencia del Rector.

4. Campaña de difusión y repudio en nuestra comunidad y en el Campus, incluyendo registro fotográfico.

5. Información al Presidente de la FECH y CGR de nuestra Facultad, solicitándoles un pronunciamiento y repudio respecto a estos hechos.

6. Presentación de una denuncia a Carabineros e Investigaciones. Contacto y petición de apoyo con la Dirección Jurídica de la Universidad para acelerar la querella y la investigación.

7. Información a la Asociación de Funcionarios y al personal de Bibliotecas de nuestra Facultad, estos últimos sacaron una declaración de repudio y condena, solicitando a los alumnos que se expresen al respecto.

Quienes hemos tenido la oportunidad de revisar y tomar contacto físico con los escombros estamos consternados, se ha producido un daño irreparable material y simbólico, que augura preocupantes presagios para el Chile del Bicentenario. Como autoridades de la Facultad hemos reaccionado enérgicamente y estamos muy reconocidos del apoyo que hemos recibido de parte del señor Rector, que estuvo gran parte del día acompañándonos en la denuncia.

Sin embargo, nos parece que todo lo realizado puede ser insuficiente si no reaccionamos además como comunidad universitaria, si no rechazamos y denunciamos este tipo de actos de manera personal, como alumnas y alumnos, como profesores y profesoras, como funcionarias y funcionarios, como comunidad y como Campus.



Prof. Jorge Hidalgo Prof. Bernardo Subercaseaux
Decano Vicedecano



Santiago, Campus Juan Gómez Millas, 29 de noviembre de 2006